Estamos bastante sorprendidos por el resultado que ha obtenido Cristina Fernández y por los malos números de Alfonsín y Duhalde…
Yo creo que también desde el gobierno deben estar sorprendidos porque la expectativa estaba puesta en el 44% de los votos, pero más del 50% ya marca un cambio muy fuerte y la oposición debe estar estupefacta. Pero nada es casual, todo es causal. Definitivamente en la elección presidencial ha habido un voto que ha privilegiado la gestión, lo que significa convalidar una situación de bonanza económica para muchos sectores por el “boom” de consumo que se ha impuesto sobre otros elementos que también forman parte de la realidad: la inflación, la inseguridad, los problemas de diferencia socio-económica que todavía existen. En la elección presidencial, la población los ha dejado de lado y ha dicho que “lo que hay me permite a mí tener un rumbo y la oposición lo único que hace es generarme incertidumbre”. No se puede analizar este triunfo sin comprender el desastroso comportamiento de la oposición.
¿Cree que estos resultados puedan modificarse para octubre?
Yo lo veo muy difícil. Hay un dato que en economía se llama “el cisne negro” y se utiliza cuando aparece un imponderable. Un ejemplo concreto fue la elección de España de 2004 y la tragedia de Atocha. Hasta ese momento ganaba Aznar y después de lo que sucedió en Atocha ganó Rodríguez Zapatero. Yo creo que si no ocurre nada de ese nivel de peso (que espero que no ocurra) es irreversible y que la presidenta se encamina hacia un triunfo cómodo, rotundo y amplio. La oposición lo que menos hizo hasta el momento fue discutir ideas concretas para demostrar que es alternativa. Mucha gente la votó a Cristina por verdadera convicción, apoyo, militancia e identificación y hay otra gente que la votó como el mal menor.
¿Cree que fue devastadora la elección para Carrió?
Elisa Carrió no ha tenido la capacidad de construcción de un proyecto político propositivo. Carrió es una mujer valiente, honesta, y realmente fuerte en cuestiones que tienen que ver con las denuncias de corrupción pero no tiene capacidad de conducción. Su fuerza ha sufrido un desmembramiento permanente. Yo creo que este es el fin de su ciclo, se terminó como proyecto político. Hay gente que entra en el ocaso político. Este es el caso de Carrió pero también de Duahalde, Alfonsín, Reutemann y Cobos.
¿Qué opina de la elección de Binner?
La elección de Binner fue interesante porque el Frente Amplio surgió como otra posibilidad en cuanto a la construcción de un espacio de centro-izquierda que puede tener alguna proyección importante para el futuro.